¿Te gustaría saber cómo conservar la carne sin nevera? La realidad es que hoy en día vivimos en un mundo lleno de facilidades con electrodomésticos y utensilios que cada vez más nos hacen la vida mucho más cómoda y sencilla. Pero, ¿y si no tuviéramos frigorífico y/o congelador donde guardar los alimentos perecederos?
El problema de mantener la carne en perfectas condiciones para su consumo, no es un inconveniente que haya surgido recientemente, las antiguas civilizaciones ya se tenían que enfrentar a ello ya que los productos cárnicos se estropean con mucha facilidad si están a la intemperie.
Por este motivo, queremos que conozcas aprendas cómo conservar la carne sin nevera de una forma fácil y sencilla.
¿Cómo conservar la carne sin nevera? 4 formas de conservación
A pesar de que, en la actualidad, casi todos los hogares tengan un frigorífico donde mantener sus alimentos en perfecto estado, puede ocurrir que, por algún motivo, necesitemos conocer otras maneras de cómo conservar la carne.
Ya sea porque se nos ha estropeado la nevera o porque no tenemos tanto espacio para almacenar, estas formas de conservación pueden ser de gran utilidad. ¡Toma nota y que no se te olvide ninguna!
1. Salmuera
Si hay un método de conservación de la carne tradicional esa es la salmuera que, además, es muy sencillo de preparar ya que tan solo se necesitan dos ingredientes más: agua y sal. El producto cárnico irá en una olla que se cubre completamente con la mezcla anterior y permite que el alimento quede muy jugoso a la hora de prepararlo en la cocina. ¿El motivo? La sal permite que la carne absorba agua por lo que es muy interesante en productos que tienden a quedar secos, como puede ser el pavo o el solomillo de cerdo.
El proceso de conservar la carne en salmuera comienza pesando el producto, y a partir de ahí, se calcula el agua (un litro de líquido por kilo de carne). Después, la sal debe ir en una proporción del 3-8% con respecto al peso del agua. Para que puedas hacerte una idea suelen ser unos 100 gramos de sal por litro de agua. Es importante que la sal esté bien disuelta antes de introducir la carne y que el espacio es suficiente para cubrir todo el producto.
Ahora bien, seguro que te preguntas cuánto tiempo es necesario tenerlo en salmuera, pues alrededor de 3 días si la pieza es de unos 5 centímetros de ancho más o menos. Si la medida es más grande, seguro que necesitarás al menos una semana. También es importante que, antes de proceder a su cocinado, lo desales correctamente cambiando el agua varias veces para quitar el exceso de sal.
2. Ahumado
¿Quieres aprender más sobre cómo conservar la carne sin nevera? Pues bien, otro de los métodos de conservación de productos cárnicos más tradicionales es el ahumado que, además, le confiere un sabor y un aroma muy característico. Eso sí, conviene no abusar de este tipo de productos ya que el humo tiene carcinógenos. Para el proceso de ahumado necesitarás un ahumador de leña en el que podrás emplear la que más te guste: cerezo, roble o manzano.
Pero, antes de nada, el primer paso para ahumar es realizar el adobo (utilizando las especias de tu preferencia). Después, siguiendo las instrucciones del fabricante, debes asegurarte de que la temperatura se mantiene alrededor de los 60-80º. Estos productos se pueden consumir tranquilamente durante varios días ya que sus propiedades se conservan sin alteración.
El tiempo de ahumado depende del tamaño de la carne, por ejemplo, una pieza grande necesitará unas 20 horas. Sin embargo, otros trozos más pequeños como unas pechugas pueden tardar unas 6 horas. Un truco para que el resultado sea excepcional es cubrirlas con papel de aluminio para que no se sequen.
3. Curado
El proceso de curado también es un sistema que se utiliza desde hace siglos para conservar carnes no muy gruesas. Este método también es conocido como salazón y ya era empleado por los antiguos romanos. A través de la curación se pueden conservar tanto carne cocida como cruda.
Para realizar el curado a un producto, se necesita sal no yodada y azúcar a partes iguales en proporción a la cuarta parte del peso de la carne. También se pueden añadir otras hierbas y especias como la pimienta, el laurel o el romero, según tu gusto.
Con la mezcla anterior, se debe frotar muy bien por todo el producto. El líquido que rezuma de la carne debe ser eliminado cada 12 horas, y después, secar con papel de cocina y volver a frotar con la mezcla del principio. Este proceso se tiene que repetir durante 3 días consecutivos. Para finalizar, se elimina la mezcla y se puede cocinar o reservar.
4. Manteca de cerdo
El problema de cómo conservar la carne sin nevera es que, si esta permanece mucho tiempo a la intemperie y sin refrigeración, las bacterias comienzan a aparecer y a desarrollarse. La manteca de cerdo puede ser un método de conservación muy sencillo y efectivo ya que su composición previene el crecimiento de las bacterias ya que evita que el aire entre en la carne.
Sin lugar a dudas, estaríamos ante el sistema para conservar carne más económico y sencillo, pues no necesitas de ningún equipo externo ni tampoco mucho tiempo de preparación. Tan solo necesitas la manteca del cerdo y un envase hermético donde almacenar la carne.
Como has podido comprobar, algunos métodos son muy sencillos y apenas se necesitan utensilios, puedes comenzar por aquellos que te parezcan más fáciles. Además, también puedes encontrar otros sistemas como la liofilización (pero no es muy económica), biltong, rillette y otros menos conocidos y convencionales.
Ahora ya sabes cómo conservar la carne sin nevera y puedes probar cuál es el resultado de prepararlo tú mismo en casa. Lo mejor de utilizar estos métodos de conservación es que podrás probar nuevos aromas y sabores en tus recetas. Y, no solo eso, es que si tu nevera se estropea no tienes de qué preocuparte pues sabrás cómo mantener los productos cárnicos en perfecto estado durante más tiempo.